El alguacil del condado de Terrell, en Texas, Thaddeus Cleveland, envió esta semana un contundente mensaje a la Casa Blanca.
“Afirman que la entrada ilegal de inmigrantes en la frontera sur ha bajado al punto de que las cifras son récords”, manifestó el alto funcionario texano.
“Pero de lo que no hablan es de los miles que siguen dejando entrar bajo los programas CBP One App y CHNV”, agregó el Sheriff Cleveland.
Se refiere en particular a extranjeros venezolanos, haitianos y nicaragüenses, entre otros países a los cuales este Gobierno les ha dado prioridad en los últimos años para que puedan venir a este país y con permisos.
Y Cleveland dejó en claro de que el hecho que sí haya números más bajos no necesariamente es gracias al Gobierno federal, sino al esfuerzo en conjunto entre las autoridades que custodian las zonas fronterizas, entre ellas su propia agencia.
MGNews estuvo en una de esas zonas en cuestión
Terrell es uno de los 10 condados más grandes del estado sureño de Texas y que cuenta con una enorme área desértica por la cual anualmente miles de personas tratan de cruzar sin papeles a Estados Unidos.
En un recorrido que este medio de comunicación hizo hace un par de meses en esa zona de la frontera, el alguacil Cleveland nos mostró por dónde foráneos en su mayoría de México, pretenden llegar a este país.
Y lugares remotos también en donde frecuentemente encuentran cuerpos de quienes fueron dejados atrás por coyotes.
Algunas veces estos cadáveres tienen horas, días, semanas y hasta meses de haber sido abandonados. Les ha tocado recoger muchas osamentas…
Lo más lamentable nos decía el comisario, es que mientras estos arriesgan sus vidas en el intento por pasar de manera desapercibida, a solo un par de cientos de millas en otro punto fronterizo, hay miles acampando al otro lado de la cerca.
Ellos solo están esperando que los dejen entrar como ‘Juan por su casa’ por la puerta grande y con todos los beneficios posibles.