El guatemalteco Mateo Fernández jamás olvidará la Navidad del 2024. Esa fecha quedará en su memoria para siempre y para su mala suerte, no por algo bueno.
Y es que la madrugada de la Nochebuena fue arrestado por haberse atrevido a conducir en estado de intoxicación.
Aparte de eso, manejó de una manera tan peligrosa que hasta expuso en peligro la vida de otras personas.
De paso, causó no uno, sino que dos accidentes y según la policía, fue tan desacerado que se dio a la fuga tras dichas colisiones.
De acuerdo con los reportes de la Oficina del Alguacil del condado de Hall, Mateo, quien reside en la ciudad de Oakwood se metió borracho en sentido contrario.
De esa manera se estrelló contra auto que se encontró de frente por la vía correcta.
Los daños que dejó atrás fueron serios
Tras el choque, el chofer centroamericano se dio a la fuga, dejando atrás a la víctima sin siquiera bajarse para ver si estaban bien o necesitaban ayuda.
En su huida, se pasó llevando el buzón de una casa, lo cual legalmente es considerado como un segundo accidente.
Y de nuevo, volvió a irse, pero desgraciadamente para él, ya la policía andaba pisándole los talones.
Un patrullero local lo vio y tras identificar que era el carro que buscaban, le ordenó detenerse.
Fernández acabó tras las rejasd acusado de manejar ebrio (DUI), llevar botellas de licor abiertas (open container) y abandonar la escena de dos accidentes (hit and run).
También encara acusaciones de tránsito, entre ellas fallar en mantenerse en su carril, meterse en contra vía, manejar con la licencia suspendida y para colmo, con llantas acabadas.
Hasta ayer, el sospechoso permanecía preso en la cárcel de la localidad de Hall a la espera de pagar los $19,050 que un juez estatal le impuso como fianza.
