Eran las 3 de la tarde cuando un padre hispano regresó del trabajo a su hogar en la ciudad de Augusta, al sureste de Georgia.
Por lo general volvía a eso de las 6pm, pero salió temprano y decidió irse a descansar, sin saber lo que le esperaba en casa.
Cuando el hombre ingresó a la vivienda escuchó unos ruidos extraños en el cuarto de su hija adolescente.
De inmediato procedió a ir a revisar y se llevó una tremenda sorpresa. Ella estaba desnuda y a su lado yacía un muchacho, también sin ropa.
Como él parecía mayor que ella, que apenas tiene 14 años, decidió llamar al 911 para denunciarlo. En cuestión de minutos la residencia estaba llena de policías.
“No llegamos a tener sexo”
Tras ser interrogados, ambos negaron haber tenido intimidad esa tarde, alegando que no quisieron arriesgarse, puesto que él no tenía un preservativo.
Sin embargo, como según el testigo los había encontrado sin ninguna prenda de vestir y acostados en la cama, la policía dudó de su versión.
Además, ambos tenían chupetones en el cuello y otras partes del cuerpo, lo que evidenciaba que habían tenido algún tipo de interacción sexual.
Por ello, Montiel Sánchez, de 18 años, fue arrestado de inmediato bajo el cargo grave de ‘child molestation’ (abuso sexual infantil).
Al ver que lo estaban apresando la chica salió en su defensa y declaró que él estaba ahí porque ella lo había invitado a pasar desde su ventana.
Que él solo accedió, pero que no habían tenido relaciones sexuales, por el contrario, que la había respetado y que solo estaban ahí viendo una película en televisión.
Las autoridades tampoco le creyeron su historia. El muchacho se fue preso y ella quedó al cuidado de su papá, quien estaba furioso por las inesperadas acciones de su niña…