El viernes pasado Amanda Alicia Chapín compareció en una corte estatal de Wisconsin para rendir cuentas por el envenenamiento de su esposo.
La mujer de 51 años no refutó el cargo grave de intento de homicidio, por el cual está presa desde hace un par de años.
Se le acusa de haber puesto en peligro la vida de Gary Chapin, su marido, al darle café mesclado con la misma sustancia con la que se sacrifican los animales enfermos.
La pareja se casó en marzo de 2022 y poco después, Amanda falsificó la firma de uno de los hijos del hombre en un documento de poder.
La fémina también convenció a su marido que modificara la escritura de su casa para garantizar que ella sería la única propietaria en caso de que él llegase a faltar algún día.
Inmediatamente después de eso, Amanda empezó a poner barbitúricos en el café que le servía al hombre. Lo hizo al menos tres veces entre julio y agosto de 2022.
Tales drogas son las mismas que los veterinarios utilizan cuando quieren aplicar la eutanasia a los animales, según los registros del Tribunal de Circuito de Wisconsin.
La tercera y última dosis que consumió Chapin lo dejaron en coma durante cuatro días. Cuando en el hospital obtuvieron los resultados de los análisis de sangre, se dieron cuenta de que había sido envenenado.
Pero contra todo pronóstico, el personal médico logró limpiar el sistema del hombre y este se recuperó. Fue dado de alta y al día siguiente, se divorció.
Mientras tanto, la sospechosa fue puesta bajo custodia y hasta el día de hoy permanece en la cárcel del condado de Lafayette.
Tras haber llegado a un acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía, ahora Amanda está a la espera de su sentencia que será emitida el próximo 15 de julio. Encara un máximo de 12 años y medio en prisión.