Las autoridades del condado de Gwinnett acaban de anunciar el arresto de un sujeto que trabajaba para el Correo de Estados Unidos.
De acuerdo con los reportes oficiales Marcus Gregory era parte de USPS hasta que se le ocurrió ganarse el dinero fácil, o sea sin cumplir con sus labores.
Aseguran que el sujeto llegaba a los contenedores de basura y arrojaba ahí decenas de sobres, correspondencia que no era suya y que estaba obligado a entregar.
También aventaba esa paquetería en áreas boscosas de la localidad dejando a la deriva a todas aquellas personas que la esperaban.
La pesquisa en torno a Marcus comenzó el pasado 31 de julio cuando las autoridades fueron notificadas por el USPS de que habían cachado a uno de sus empleados cometiendo actos irregulares.
Y es que cuando los clientes del correo empezaron a quejarse durante semanas de la ausencia de su correspondencia empezaron a investigar y todo apuntaba hacia el mismo cartero.
Le pusieron vigilancia sin que este se diera cuenta y durante varios días lo siguieron, fue así como supieron lo que hacía.
Cuando la policía lo interceptó, lo arrestaron en el acto y tras revisarlo, descubrieron que tirar el trabajo no era su única falla.
Y es que le encontraron un arma de fuego, lo cual no está permitido para los empleados postales y, por si fuera poco, también tenía consigo algunas drogas ilegales.
Cuando requisaron su carro personal que tenía estacionado en la sede del correo, le hallaron más de 200 piezas de correo, por lo cual también enfrenta un cargo adicional.
Los oficiales entonces fueron hasta su casa y ahí encontraron todavía más correspondencia a nombre de otras personas a las cuales debía entregárselas.
Hasta ahora, Gregory encara unos 60 cargos, entre ellos conducir intoxicado, posecion de narcóticos, posesión ilegal de un arma de fuego, robo de correspondencia, fraude y obstrucción a la justicia.
