Cuando Matthew Matías Silva, de 47 años fue arrestado bajo el cargo grave de ‘child molestation’ sintió que el mundo se le había venido encima.
No es para menos, ya que esa sola acusación fácilmente le habría podido acarrear hasta dos décadas tras las rejas.
Pero a Matías le fue muy bien. Y es que cuando por fin le tocó sentarse en el banquillo de los acusados para rendir cuenta por tales actos cometidos en contra de dos niñas entre 2016 y 2018, llevaba un haz bajo la manga.
Ya había llegado a un acuerdo con la Fiscalía para declararse culpable de los cargos que se le imputaban a cambio de una reducción de los cargos y por ende, recibir un castigo mucho menor.
El residente de la ciudad de Winder solo fue acusado al final de “agresión sexual” que es cuando hay manoseos y tocamientos solamente.
Por ello, fue sentenciado a purgar 10 años de libertad condicional, o sea no recibió tiempo en la cárcel.
Además, Silva no va a quedar registrado como predador sexual, así que le fue muy bien en lo que cabe.
La Oficina del Alguacil del condado de Hall fue la agencia que efectuó el arresto de este sujeto.
Se supo que la Fiscalía decidió acceder a las peticiones de Matías en vista de “la naturaleza de las evidencias en su contra” y otros factores que pudo haber utilizado la parte defensora del acusado.
En pocas palabras, al parecer las pruebas que tenían en su contra no eran tan contundentes y sabían que podían perder el caso en el juicio. Así funciona la justicia en este país.
