Rafael García/Colaborador para MGNews
El jefe de la fuerza policial de El Salvador se encuentra entre las nueve personas que murieron cuando el helicóptero militar en el que viajaban se estrelló en la nación centroamericana el domingo por la noche, hora local.
El director general de la policía, Mauricio Arriaza, escoltaba a un sospechoso de un plan de fraude multimillonario a la capital, San Salvador, cuando el helicóptero se estrelló poco después del despegue.
El sospechoso, el exdirector bancario fugitivo Manuel Coto, había sido acusado de participar en la malversación de 35 millones de dólares de la cooperativa de crédito COSAVI en El Salvador.
El presidente salvadoreño, Nayib Bukele, escribió en X que no creía que el accidente debiera considerarse como tal y ordenó una investigación.
El presidente había nombrado a Arriaza Chicas jefe de policía en 2019 y fue clave para la ofensiva de Bukele contra las infames pandillas de El Salvador.
Bajo el gobierno de Bukele, la impactante tasa de homicidios del país se redujo, pero los grupos de derechos humanos dicen que la seguridad ha tenido un costo, ya que algunos sospechosos han sido detenidos arbitrariamente y se les ha negado el acceso a juicios justos.
El presidente Bukele elogió al difunto jefe de policía como “una parte fundamental para llevar la paz y la seguridad a nuestro pueblo”.
Bukele dijo que solicitaría ayuda internacional para examinar las causas del accidente.
Las Fuerzas Armadas de El Salvador dijeron que el helicóptero UH-1H cayó cerca de Pasaquina, a unos 10 kilómetros (seis millas) de la frontera con Honduras.
El helicóptero transportaba al jefe de policía Arriaza, a Coto y a un equipo de noticias de televisión y desgraciadamente todos los que estaban a bordo murieron en el accidente, dijo el ejército salvadoreño.
Los funcionarios hondureños dijeron que la policía había capturado al exdirector del banco cuando intentaba llegar a Estados Unidos con la ayuda de un traficante de personas y la noticia de su arresto causó sorpresa y confusión, ya que no era de conocimiento público que se encontraba prófugo.
De hecho, las autoridades salvadoreñas habían anunciado en julio pasado que Coto había sido detenido en Panamá.
No está claro cómo llegó a Honduras.
Coto fue una de las 32 personas acusadas de malversación de fondos y lavado de dinero por la desaparición de 35 millones de dólares de las arcas de la cooperativa de crédito COSAVI.
El fiscal general de El Salvador acusó al grupo de desviar dinero de los ahorros de la gente y utilizarlo para comprar propiedades y vehículos de lujo, entre otros artículos. En total, 15 personas han sido detenidas en relación con el caso y entre ellas los padres del fallecido Coto.